Es real. Duele. Hace un daño incalculable.

Estoy hablando del abuso físico.

Alguien que fue abusado físicamente una vez me dijo esto: "Todavía lucho día a día tratando de entender mi vida y lo que hice para merecerlo". El hecho es que esta persona no se lo merecía. Jamás nadie lo merece.

Entonces, ¿qué es el abuso físico? Hay mucha confusión y negación sobre lo que es. Pero puede incluir: - golpear, abofetear, patear, morder - pellizcar, empujar, tirar - cortar o disparar - encerrar dentro o fuera de una habitación o encarcelamiento falso - estrangular o cualquier tipo de tortura - ahogar - exposición a frío glacial, calor (quemar) o descarga eléctrica.

No estamos hablando de una lesión accidental. Es la violencia física llevada a cabo intencionalmente por alguien que ejerce autoridad sobre otra persona para causar sentimientos de intimidación, dolor, lesión u otro sufrimiento o daño físico.

Siempre recuerda: El abuso no es tu culpa. Nadie merece ser herido físicamente.

¿QUIÉN ES UN ABUSADOR?

Típicamente, el abuso físico es causado por la incapacidad de una persona para controlar su ira o frustración. Esta ira suele ser por cosas que no tienen nada que ver con la persona que está siendo abusada. Los abusadores pueden ser provocados por estrés laboral o personal, soledad, depresión, falta de amigos o trastornos psiquiátricos. Es posible que ellos mismos hayan sido abusados o que sean adictos al alcohol o a las drogas.

El abuso físico puede ocurrirle a cualquiera. Y es casi imposible reconocer a un abusador por su apariencia externa. Puede ser el chico encantador que vive al lado o el atractivo profesor de la escuela. En la mayoría de los casos, la persona que causa el abuso es un padre. Pero los abusadores también pueden ser hermanos mayores, parientes, tutores o parejas.

La culpa del abuso recae completamente en el abusador. Una persona cuyos padres abusaron de ella me dijo esto: "Algo que aprendí que realmente me ayudó mientras crecía fue que tenía que darme cuenta de que no era mi culpa - que yo no los hacía actuar de esa manera y que no merecía lo que me estaban haciendo. Es tan fácil caer en la trampa de la autoculpabilidad. Te sientes más adulto que tus padres, así que aceptas la responsabilidad de las cosas que en realidad son su responsabilidad. "Debí haber sabido que no debía decir eso", te dices a ti mismo, o, "No se enfadarían tanto si no me equivocara todo el tiempo".

Si estás siendo abusado/a físicamente, lo más importante que puedes hacer es encontrar a alguien en quien puedas confiar y buscar su ayuda. Ninguna recuperación del abuso físico se produce sin este tan importante primer paso.

Si estás en peligro inmediato, ponte en contacto con la policía (911) lo antes posible. Si eres menor de 18 años y vives en los Estados Unidos, también puedes llamar a la Línea Nacional de Abuso Infantil de Childhelp al 1-800-4-A-CHILD (1-800-422-4453).

También puedes conectarte con un mentor gratuito y confidencial a través del botón "Conéctate con un Mentor" que se encuentra más abajo. Puedes usar tu nombre real o uno falso. Depende totalmente de ti.

(Artículo original encontrado en https://www.thehopeline.com/what-is-physical-abuse)




Este artículo fue escrito por: Dawson McAllister

Autor de la foto: Photo by Nik Shuliahin on Unsplash