En 1977 quedé embarazada siendo una adolescente. En 1978 me convertí en una madre adolescente casada y lactante. En 1980 me convertí en una madre soltera que recibía ayuda del Estado.

A lo largo de los años también he sido una madre universitaria, una madre trabajadora, una madrastra, una madre que comparte el coche, una madre sobreprotectora... pero NUNCA una madre perfecta. Pregúntenle a mi hija, ¡ella les dirá!

Muchas mujeres se sienten inadecuadas como madres. Tal vez tú también te identificas.

Estadísticas recientes muestran que hay 24 millones de "hogares de madres solteras" en los Estados Unidos. Bastante impresionante considerando que el número total de madres es de 85.4 millones.

En esos hogares de madres solteras, "mamá" no es sólo la mamá. Es el padre, el sostén de la familia, quien disciplina, el chef, el taxista, y la lista continúa. Está plagada de estrés. Está cansada todo el tiempo. Y de vez en cuando, se molesta con toda la situación y contempla la posibilidad de darse por vencida.

Además, está el estigma de otras madres. Las que por fuera parecen "tenerlo todo". Miran con desprecio a aquellas cuyos hijos no tienen los nuevos jeans, zapatos y carteras de diseñador. Sin embargo, nunca han tenido que preocuparse de dónde va a venir la próxima comida de su hijo. Nunca han buscado entre los asientos del sofá monedas para la gasolina para poder llevar a sus hijos a la escuela.

¡Estoy aquí para decirles BRAVO a todas las madres solteras!

Su tenacidad mantiene su familia a flote. Es esa necesidad instintiva de proveer para sus bebés. Es dejar a un lado sus propios sentimientos de agotamiento y demostrar lo fuertes que son.

Hay un viejo dicho que dice: "La necesidad es la madre de la invención". Las madres solteras son inventoras sólidas. Son maestras de la supervivencia.

Aquí hay cinco desafíos y soluciones que las madres solteras enfrentan:

1. COMIDA Y REFUGIO
¿Notan que el "alimento" en "comida y refugio" siempre es lo primero? La primera preocupación de una madre es siempre alimentar a sus hijos, seguido de proporcionar un lugar seguro al cual llamar hogar.

Un gran documental para ver es Un Lugar en la Mesa. Aborda la lucha contra el hambre y muestra a un grupo de madres solteras que van a Washington a pedir un cambio.

Un excelente libro para leer es " Bueno y Barato" de Leanne Brown: [Come bien con 4 dólares al día] (https://www.amazon.com/-/es/Good-Cheap-Eat-Well-Day/dp/0761184996/ref=sr_1_1?__mk_es_US=%C3%85M%C3%85%C5%BD%C3%95%C3%91&dchild=1&keywords=Good+And+Cheap+Eat+well+on+%244%2Fday&qid=1599580923&sr=8-1). Brown aborda recetas saludables que se ajustan al presupuesto de los subsidios alimenticios y da consejos útiles sobre las compras.

Puedes investigar si en tu pais existe algun tipo de ayudas para madres solteras o si existen organzaciones que esten haciendo este tipo de trabajo en tu ciudad y que puedan ayudarte también.

2. DUDAR DE SÍ MISMO

Es tan difícil saber si estás haciendo un buen trabajo como padre soltero. Cuando estás en pareja, tienes a alguien que está de acuerdo (o en desacuerdo) con tus métodos, que puede ayudarte a ver el valor de tus momentos positivos como padre y también a mejorar cuando te quedas corto. Pero, como padre o madre soltero/a, hacerse una autocrítica puede ser muy difícil sin sentirse culpable.

Por eso es tan importante rodearse de otras madres. Puedes ver en qué se quedan cortas, aprender de sus errores y también inspirarte en sus éxitos. Con diferentes personalidades y situaciones, comparar y compartir resultados puede ser una gran terapia.

También considera la posibilidad de pedirle consejo a tu madre o a otro miembro de la familia. Ellos pueden tener experiencia con una "personalidad" similar a la de tu hijo o hija, y pueden ser capaces de darte una información valiosa.

3. EL ESTRÉS Y LA ANSIEDAD POR EL DINERO

Incluso cuando se recibe la manutención de los niños o la ayuda del gobierno, la última semana del mes puede ser una fuente segura de ansiedad.

Ocurren eventos inesperados. Ocurren emergencias. ¡Mantén la frente en alto! A menudo, no puedes elegir tus circunstancias, pero puedes elegir tu actitud. Recuerda no centrarte en los contratiempos, concéntrate en prepararte para lo mejor que vendrá.

Además, date permiso de pedir ayuda. Tal vez haya otra madre en tu círculo que cambie de guardería. O tal vez conozcas a alguien con quien puedas hacer un trueque proporcionando una comida casera a cambio de pequeñas reparaciones en la casa o el auto. Hay situaciones difíciles que algunos de tus acreedores pueden honrar y trabajar contigo para encontrar un plan de pago más razonable. A menudo hay una solución, ¡así que sé positiva!

4. CULPA

"Estoy tan ocupada trabajando, que apenas veo a mis hijos. Pero estoy tan cansada cuando llego a casa que ¡sólo quiero acostarme!" ¡Cuando estamos cansados y gruñones, nos sentimos culpables por estar cansados y gruñones!

Este es el asunto: tenemos que ser honestos con nuestros hijos y hacerles saber que nos cansamos. No hay nada malo en necesitar descansar. Y ese tiempo de descanso puede tomar algo de planificación previa, pero vale la pena. Organiza un día en el que un amigo o un miembro de la familia pueda recoger a los niños de la escuela o llevarlos al entrenamiento de baloncesto. Incluso un par de horas haciendo algo que te gusta hacer te refrescará y te recargará para la siguiente jornada.

5. CONECTAR CON MIS HIJOS

Cuando estamos en modo de supervivencia, a veces es difícil "sólo ser mamá".

Una cosa divertida y que conecta que puedes hacer es jugar al reportero. Entrevistar a tus hijos y dejar que te entrevisten a ti. Te ayudará a entender sus necesidades, deseos y metas personales.

En la cena, practiquen la escucha activa. Míralos a los ojos cuando te hablen. Tu hijo se abrirá cuando intentes comprender su mundo. Valida sus sentimientos. En el mundo de un niño, las cosas grandes pueden ser pequeñas, y las pequeñas grandes. Al comprender sus sentimientos y su forma de afrontar las situaciones, puedes guiarlos mejor hacia las soluciones.

Haz preguntas. Muestra un interés genuino y demuéstrales que su punto de vista es importante. Las discusiones familiares y las conversaciones abiertas son pertinentes para el desarrollo y la estabilidad de un niño. Creerán más en algo en lo que hayan participado en la decisión.

Por encima de todo, a medida que superamos los desafíos, recuerda que nuestros hijos nos aman sin importar nada. Y creo que si les preguntamos, probablemente dirán que somos las madres perfectas... ¡en un día bueno!

Este artículo fue escrito por: Eileen Smith